Desde hace más de un mes, las autoridades francesas limitan el tránsito de camiones por la carretera RN-134 debido a un desprendimiento cerca del túnel de Somport. Las rutas alternativas tienen limitaciones de velocidad o suponen desvíos de muchos kilómetros, por lo que provocan pérdidas económicas que el Gobierno aragonés cifra en 3 650 000 euros si las obras finalizan el 1 de agosto. Estos costes se unen a los sufridos durante décadas por la falta de compromiso político de los Estados español y francés en favor del desarrollo de los territorios interiores y fronterizos del Pirineo central, de visión económica al planificar sus inversiones en carreteras y ferrocarriles y de diligente aplicación de las disposiciones sobre libre circulación de personas y mercancías en esta zona de la UE, todo lo cual lastra el desarrollo de amplias zonas de Aragón, Aquitania y Mediodía-Pirineos.
¿No cree la Comisión que, a la vista de tan larga y frustrante experiencia, hay que promover la firma de un acuerdo que comporte obligaciones para la UE y los Estados español y francés con miras a garantizar la adecuada fluidez de las comunicaciones por el Pirineo central, que incluya actuaciones frente a contingencias como la actual y como la reapertura y modernización en un plazo garantizado de la línea ferroviaria Zaragoza-Pau por Canfranc?
